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Escritos de León Trotsky (1929-1940)

Preguntas a la Leninbund

Preguntas a la Leninbund

Preguntas a la Leninbund[1]

 

 

24 de agosto de 1929

 

 

 

Estimados camaradas:

 

Esta carta no fue escrita para ser publicada. Es un intento de clarificar ciertos problemas fundamentales de la estrategia de la Oposición. No es el primer inten­to. En una serie de cartas traté de verificar la línea prin­cipista del Volkswille y la Leninbund porque no se pue­de obtener un panorama claro en base a artículos extre­madamente contradictorios.

Hace poco -el 13 de junio de 1929- dirigí un pedi­do oficial de informes a la dirección de la Leninbund y me prometieron una respuesta. Pero, nuevamente, la espero en vano. Desde luego, no se trata de un asunto personal. El conjunto de la Oposición comunista, tanto en Alemania como en otros países, tiene derecho a conocer las posiciones que asume la dirección de la Leninbund sobre los problemas fundamentales de la revolución internacional.

La Oposición es una pequeña minoría. Su única garantía de éxito radica en una línea clara. La Lenin­bund no la tiene. Esto es lo que hay que decir, lamenta­blemente, en primer término. Tanto en lo que se refiere a los problemas internos de Alemania como a los pro­blemas internacionales, Volkswille oscila entre Brand­ler y Korsch.[2] Espero dedicar un artículo especial a las posiciones de la dirección de la Leninbund sobre los problemas internos de Alemania. Aquí sólo quiero reiterar y precisar las cuestiones que he planteado re­petidas veces, aunque en vano, a los directores de Volkswille y a la dirección de la Leninbund.

Ustedes han acusado más de una vez a la Oposición rusa de "no ir lo bastante lejos" porque, dicen, no com­prende que el termidor ya es un hecho. Les he pregun­tado una y otra vez: ¿Qué significa eso? ¿Qué opciones le quedan a la Oposición Internacional respecto de la URSS?

Si el termidor "es un hecho", el proceso ruso ha en­trado definitivamente en la senda capitalista. Su tesis no puede significar otra cosa. Siendo así, ¿cuál es su opinión sobre la economía planificada y la legislación que restringe la expansión capitalista y la acumulación privada? ¿Cuál es su actitud respecto del monopolio del comercio exterior? Desde el punto de vista del desarrollo capitalista todas estas instituciones, decretos y me­didas constituyen obstáculos utópicos y reaccionarios para el desarrollo de las fuerzas productivas. ¿Cuál es su opinión?

Reivindica la libertad de organización en la URSS, igual que en los países capitalistas. Nuevamente, es im­posible desentrañar el significado de esta actitud. La li­bertad de organización jamás fue ni puede ser una rei­vindicación aislada, es un componente del régimen de­mocrático burgués. Es inconcebible la libertad de orga­nización sin libertad de reunión, de prensa, etcétera; en otras palabras, sin instituciones parlamentarias y lucha partidaria. ¿Cuál es su posición al respecto? A pesar de todos mis intentos, no he podido averiguarlo hasta el momento.

Su posición sobre la defensa de la URSS frente al imperialismo es igualmente confusa. La importancia excepcional de esta cuestión se reveló una vez más con el impacto del conflicto sino-soviético. Una serie de pu­blicaciones de la Oposición asumió una posición clara­mente errónea al respecto. El artículo de fondo de Con­tre le Courant, 35, fechado el 28 de julio, llevó este error hasta sus últimas consecuencias.

¿Qué hizo en este caso el Consejo de Redacción de Volkswille y Die Fahne des Kommunismus? No se comprometió. Inició una polémica. Al korschista H.P. y al marxista Landau se les concede idéntica oportunidad de intervenir en la misma. Pero el Consejo de Redac­ción se eleva "por encima" del marxismo y del kors­chismo. Por un lado, Die Fahne des Kommunismus pu­blica el artículo groseramente erróneo de Contre le Courant, y por el otro se preocupa de subrayar que di­cho artículo es la posición oficial de la redacción france­sa. ¿Acaso una publicación comunista tiene derecho a callar el hecho de que este artículo, aunque fuera diez veces más oficial, constituye una flagrante ruptura con el marxismo? En un momento critico, de conflicto internacional, los lectores de su publicación quedan desar­mados ideológicamente. Se les ofrece una opción: las posiciones de la Oposición rusa o las posiciones de Korsch, el que a su vez se limita a repetir los argumen­tos de la socialdemocracia.

No puedo imaginar siquiera que toda su dirección, y especialmente todos los militantes de la Leninbund, comparten esta posición o falta de posición. Desgracia­damente, es imposible formarse una opinión de la vida ideológica interna de la Leninbund sobre la base de Volkswille. Ni por un instante se me ocurre pensar que no existe vida ideológica interna, pero debo llegar a la conclusión de que Volkswille no la refleja. Este síntoma es, de por sí, en extremo alarmante.

Una mayoría dominante en un estado o en un parti­do, que disponga de un aparato poderoso, de abundan­cia de fondos, de una prensa bien financiada, puede vi­vir mucho tiempo de omisiones, vacilaciones y ambigüedades. El centrismo burocrático stalinista es la me­jor prueba de ello. Pero toda minoría opositora que imi­te a este centrismo mancha la bandera que la cobija y se condena inexorablemente a la destrucción. En su posi­ción actual, la Leninbund no puede dirigir a la vanguardia del proletariado alemán, ni siquiera a la vanguardia de la vanguardia. La Leninbund debe rearmarse ideo­lógicamente y a la vez reconstruir sus filas. Para eso, en primer lugar, es necesario que se clarifiquen sus princi­pios. No creo que ustedes puedan seguir soslayando las cuestiones planteadas más arriba. De ninguna manera agotan toda la gama de problemas que enfrenta la revo­lución internacional, pero la respuesta a los mismos sentará la premisa necesaria para encarar correctamen­te otros problemas.

La Leninbund necesita una plataforma. Sus publica­ciones, en lugar de dedicar sus columnas a Jimmie Higgins y las noticias espectaculares del momento, deberían ser un instrumento para elaborar una platafor­ma marxista para la izquierda comunista alemana.

 

Con saludos comunistas,

 

L. Trotsky



[1] Preguntas a la Leninbund. Con autorización de la Biblioteca de la Universidad de Harvard. Traducido [al inglés] para este volumen [de la edición norteamericana] por Marilyn Vogt.

[2] Karl Korsch (1889-1961): ministro del gobierno socialdemócrata-comunista del estado alemán de Turingia, fue expulsado del PC Alemán en 1929 por su supuesto "trotskismo". Formó una pequeña secta ultraizquierdista.



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