Logo
Logo
Logo

Escritos de León Trotsky (1929-1940)

La situación en el Buró de la Juventud de Estocolmo

La situación en el Buró de la Juventud de Estocolmo

La situación en el Buró de la Juventud de Estocolmo[1]

 

 

23 de marzo de 1935

 

 

 

Al Secretariado Internacional

Copias a los miembros del pleno

Copia al camarada Held[2]

 

Estimados camaradas:

 

La situación en el Buró de la Juventud de Estocolmo se ha vuelto absolutamente intolerable. El Buró se transformó de hecho en un asunto privado del SAP. En la conferencia de la IAG el representante oficial del Buró de Estocolmo atacó a los camaradas Sneevliet y Schmidt, que defendieron la consigna de la Cuarta Internacional. No debemos olvidar que ésta es una consigna básica de la organización juvenil a la que hemos adherido. La gente del SAP continúa con su juego acos­tumbrado. Firman algún documento en favor de la Cuarta Internacional, luego combaten la política que se desprende de él.[3] En realidad somos los únicos enemi­gos que el SAP combate. No lo tomamos trágicamente, mientras el SAP actúa en su propio nombre. ¿Pero cómo podemos tolerar que un representante del Buró de la Juventud se permita atacar a los representantes calificados del programa de la Cuarta Internacional? ¿Podemos soportar que el SAP, que ideológica y políti­camente no representa gran cosa se trepe sobre nuestras espaldas para combatirnos más fácilmente? El liderazgo del SAP en el Buró de Estocolmo se explica por el hecho de que de Kadt, desde la conferen­cia de la Juventud, aprovechándose de que el camarada Schmidt está preso y usurpando la representación del OSP, apoyó al SAP en contra de nosotros y le aseguró una posición dirigente. Y a su vez el joven del SAP utili­zó el mandato de de Kadt para atacar a Schmidt porque éste no quería traicionar el programa.

Ellos todavía son la Juventud [Socialista] sueca. Desgraciadamente los conocemos muy poco. Pero lo que sabemos de la tendencia dirigente del partido no nos inspira ninguna confianza. Recuerdo que los dirigentes de la juventud sueca no querían que Held resida en Estocolmo, aunque es miembro del Buró, para impe­dirle así entrar en su organización. En consecuencia, ya desde antes del comienzo de la colaboración los diri­gentes de la juventud sueca demostraron una feroz hostilidad hacia nuestra tendencia y nuestras ideas. El SAP se apoya en esta hostilidad. Es natural. Pero, ¿cómo podemos disimular e incluso apoyar este acuer­do absolutamente nefasto? El camarada Held está en Oslo y el joven del SAP viene a la conferencia de París para atacarnos. Me pregunto qué representa el SAP, y especialmente su juventud. Alegan tener cinco mil afi­liados en Alemania. Esto no se puede comprobar. No tenemos contacto más que con la camarilla de los emi­grados, que no son marxistas sino maniobreros oportu­nistas. En varios países se aferran a las camarillas burocráticas y a los individuos del tipo de de Kadt para combatir el programa de la Cuarta Internacional.

No quiero hacer ninguna comparación de las fuerzas ideológicas. Como tendencia, nosotros tenemos una tradición, una doctrina, un programa y una literatura. El SAP no tiene nada. Veamos el aspecto cuantitativo. El partido holandés unificado cuenta con cinco mil miembros, lo que se puede demostrar muy bien por lo que sé, la mayoría son jóvenes.

Nuestra sección francesa realizó un gran trabajo en la juventud. Su influencia precisa se puede medir con cifras exactas tomando en cuenta la última conferencia de la "Entente del Seine"[4] (en esta conferencia el SAP ganó, para combatirnos, a un delegado de cada treinta).

Nuestra juventud belga ya está desarrollando una importante tarea en la JGS. La organización juvenil del Partido de los Trabajadores de Estados Unidos ya representa una fuerza considerable y avanza exitosamente. Y paso por alto a nuestra juventud de América Latina, China, Suecia, España, etcétera. Cito sólo los hechos que se pueden comprobar. ¿Y la URSS? Con sólo tomar en consideración las expulsiones de "trotskistas" de estos últimos dos me­ses, tenemos derecho a afirmar que allí nuestras numerosas fuerzas, para no hablar de las tradiciones ideoló­gicas y políticas, son mil veces más importantes que las del SAP y la juventud sueca juntos. ¿Qué interés tenemos, entonces, en apañar con nuestra autoridad el trabajo del SAP contra la Cuarta Internacional y especialmente contra nosotros como tendencia? Le reproché a nuestra juventud su actitud demasiado indulgente e indiferente respecto a la confe­rencia. Tengo que decir que la debilidad persiste. Crea­ron en París un sub-buró en el que nuestra juventud, que es algo serio, tiene la misma representación que B. Goldenberg, que no es más que confusión menchevi­que. Hasta se están preparando para editar junto con Goldenberg un folleto sobre la Segunda y la Tercera Internacional. Aquí la ligereza supera todos los límites. Ya firmamos un documento común con el SAP, que éste traicionó y atacó. ¿Cómo podemos criticar en un docu­mento conjunto a la Segunda y a la Tercera Internacional si no estamos de acuerdo en la necesidad de una Cuarta? Con tales procedimientos se ponen en ridículo problemas de importancia histórica. Nuestra juventud necesita templarse, necesita una militancia adecuada a la época. ¿Dónde lograrán este entrenamiento si se dejan aterrorizar por los maniobreros de una camarilla insignificante? Esta conducta terminará por comprome­ternos internacionalmente y echar a perder los cuadros de nuestra propia juventud. Me parece absolutamente imperativa la resuelta intervención del Secretariado Internacional y del plenario. Estas son las primeras medidas que creo indis­pensables:

1.Todas nuestras secciones juveniles tienen que pronunciarse clara e implacablemente sobre la actitud del representante del Buró de Estocolmo en la confe­rencia de París; es necesario condenarlo oficialmente y desautorizarlo de manera formal. La desautorización se publicará en todos nuestros periódicos.

2. Hay que reorganizar el Buró de Estocolmo. El programa mínimo de la organización exige que se lo complete con un representante del partido holandés y uno de la sección francesa. El buró de cinco tiene que fijar su lugar de residencia y nombrar su secretariado.

3. Hay que liquidar inmediatamente el sub-buró de París.

Si el SAP y los suecos no están de acuerdo, peor para ellos. Sabremos realizar nuestros objetivos sin su augusta dirección.

Dado el nefasto rol que el SAP juega en Francia en este momento, sería criminal arrastrar este asunto y continuar con la ambigüedad. Les pido con la mayor insistencia que tomen esta cuestión lo más rápidamente posible.[5]

 

Crux [León Trotsky]



[1] La situación en el Buró de la Juventud de Estocolmo. International information Bulletin, Liga Juvenil Espartaco de Norteamérica, sin fecha, 1935. Firmado "Crux". El Buró Internacional de organizaciones Juveniles Revo­lucionarias se fundó en febrero de 1934, en una conferencia que comenzó en Holanda y terminó en Bélgica, que tenía el objetivo de "trabajar por la creación de una nueva organización juvenil internacional". Las principales organizaciones que la formaban eran la juventud de la ICL y la de varios grupos de la IAG. Estableció un Buró de la Juventud en Estocolmo, que pronto se paralizó a causa de las diferentes perspectivas, especialmente a medida que la tendencia del SAP y sus aliados del Buró de la Juventud se endurecían en su oposición a la Cuarta Internacional. El Buró de la Juventud envió un delegado a la conferencia de la IAG de febrero de 1935, el que denunció a los delegados holandeses que apoyaban la Cuarta Interna­cional, Sneevliet y Schmidt. Este delegado, que también era miembro del SAP, mas tarde se hizo muy conocido como canciller socialdemócrata de Alemania Occidental; su nombre era Willy Brandt.

[2] Walter Held (m. 1941): emigrado alemán y delegado de la ICL al Buró de la Juventud; posteriormente fue secretario de Trotsky en Noruega. Poco antes de que los nazis invadieran Noruega se fue a Suecia y consiguió los documentos necesarios para entrar en Estados Unidos. En la primavera decidió viajar vía la URSS y Turquía, pues en ambos países le garantizaron los permisos de tránsito necesarios. La policía secreta soviética lo sacó del tren y lo fusiló en Saratov.

[3] En la conferencia de París de agosto de 1933 el SAP firmó la Declaración de los Cuatro que llamaba a formar una nueva internacional. El SAP y el OSP también firmaron una resolución por la que se asociaban con otros cinco grupos opuestos a una nueva internacional

[4] En un congreso de la Juventud Socialista de la Entente del Seine, realizado a fines de febrero de 1935, una "moción trotskista" obtuvo 236 votos, mientras que sus adversarios obtuvieron 408.

[5] Pese a las protestas de muchos afiliados al Buró de la Juventud, Brandt y sus aliados se fueron más a la derecha y en agosto de 1935 expulsaron a Held. El Buró de la Juventud se disolvió poco después.



Libro 4